Las uvas se cosecharon en febrero, de los cuadros SUR 5 y SUR 8, ubicados en el sector más frío del viñedo ubicado en la ladera noreste del Cerro del Toro y a dos kilómetros en línea recta del Océano Atlántico.
El suelo es de textura franco limoso con presencia de carbonato de calcio y gravilla. Las plantas son de reproducción clonal 548 sobre portainjerto 3309. Una vez ingresada la fruta a bodega los racimos fueron despalillados y, tras salir de la prensa, se sometió el mosto a un desfangado estático con frío durante 48 horas.
Se activó la fermentación alcohólica en depósitos de acero inoxidable con levaduras seleccionadas a 16 °C. Una vez finalizada la fermentación se mantuvieron las borras finas (lías), para iniciar el trabajo de crianza durante 6 meses; no tuvo contacto con roble.
En agosto, el vino fue estabilizado y filtrado antes de embotellarse.
